Dir. Takeshi Kitano
Japón / EEUU / GB 2000
* Todos estaremos de acuerdo en que, nos guste más o menos, el señor Kitano tiene un peculiar sentido de todo: del humor, la acción, la violencia, la ternura, el amor, lo patético… y en esta película, del honor; del honor como ya lo hemos visto en otras de sus obras sobre la yakuza, pero aquí con un tratamiento diferente, supongo que por ambientarla en los EEUU, con personajes alejados del perfil humano nipón con el que había siempre trabajado Kitano.
* Ya la historia de por si tiene su meollo: un yakuza huido de Japón se encuentra con que su hermanastro, al que envió a América a estudiar, es solo un chusmetilla de poca monta. Y el personaje de Aniki (Kitano) encuentra así algo que hacer en EEUU, formar un clan yakuza que eleve a su hermano a la categoría de verdadero gangster, y no seguir siendo un pandillero cualquiera.
* Una de las cosas que me encantan del cine de este hombre, y que aquí está muy presente, es que su frialdad, hieratismo, parquedad de diálogos de los personajes, y especialmente de los interpretados por Takeshi, hace que debamos recrear partes de la historia y el mundo interior de los personajes (motivaciones, actitudes, miedos, añoranzas…) por nosotros mismos, a partir de un gesto, una mirada, una sucinta acción, como todas las que se desarrollan en sus películas, hechas a base de insinuaciones, vacíos y acometidas. Su cine tiene la ventaja de que quienes no sean dados a la reconstrucción disfrutarán quizá de su violencia, su absurda comicidad, que se yo; y que aquellos tendentes a darle al coco, edificarán su propia historia, e interpretarán a los personajes libremente, en base a lo que Kitano tenga a bien ofrecer: ¿Que pensaba Aniki hacer en EEUU una vez encontrado a su hermano? ¿Que le lleva a su decisión? ¿Cómo interpretar el personaje de la mujerzuela que le acompaña, y que trasmite una ternura inquietante, pero ternura de todos modos? ¿Cómo enfrentarse a la perturbadora visión del honor y la lealtad que plasma para el universo de la mafia? Cada uno verá una “Brother”.
* Aquí, más que en ninguna otra película, es complicado sondear y reflexionar sobre ese sentido “caballeresco” de los yakuza. Es más difícil porque es más incongruente al sacarlo de su contexto nipón, donde ya es discutible y espantoso: el hecho de que una comunidad de personas, algunas con no menos cultura o talento que aquellas desligadas de la mafia, hagan de la violencia, la ilegalidad y la corrupción su modo de vida, imponiendo respeto, dominando estamento sociales, y con unos códigos de conducta y éticos alucinados y alucinantes. La carroña más caballeresca desde la mesa redonda bretona; chusma con principios en un mundo propio, extorsionando el ajeno. Aunque el nuevo "hermano" de color parezca vislumbrar parte del sentido de la vida yakuza. ¿Realmente Aniki lleva a su hermano a un nivel superior, o lo degrada más? Era pobre y poco honrado, ahora es rico y criminal. El supuesto afecto de Aniki por su hermano en mi opinión queda desvirtuado por la conciencia de Aniki de que destruye a su hermano al inmiscuirlo en ese mundo; pero lo dicho, quien sabe. Buitres trajeados.
* Kitano nos cuenta como se hacen y destruyen clanes mafiosos y personas, con su sempiterno tono absurdo, cómico, conmovedor, y... violento, como no.
viernes, julio 10, 2009
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3 comentarios:
Como me gusta esta película y que poca gente la entiende realmente, muy buena reseña Irian, como siempre claro está.
Saludos...
Fue mi primer encuentro con el cine de Kitano y la verdad es que me gustó bastante y me empujo a ver el resto de su filmografía.
Muy buena reseña,
Saludos.
Troncha: De la reacción de la gente ante el cine de Kitano puede esperarte de todo un poco. Supongo que esta película, por estar ambientada en EEUU, hecha con dinero no solo nipón... quizá algunos seguidores de Kitano la tengan atravesada, y por eso no cale demasiado; aunque vamos, navegando por internet, acogida tiene esta cinta.
Fantomas: Si señor, esas cosas me encantan. A mi me pasa que me tiro años diciendo "a ver si veo algo de tal menda", y cuando me planto ante alguna película suya me encanta y de golpe me trago una pila. Yo creo que empecé con Kitano con "El Verano de Kikujiro", o quizá "Dolls"... todas me flipan.
Un saludo a ambos.
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